La Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (#CODHEM) ha emprendido una iniciativa significativa en el último año y medio para hacer que documentos legales, tesis, anuncios, señales y otra información útil sean accesibles para la comunidad con discapacidad visual, mediante su traducción a #braille.
Este esfuerzo pionero busca empoderar a las personas con discapacidad visual para que accedan de manera independiente a contenidos escritos en papel, láminas o materiales de acetato.
Si bien no todas las personas con discapacidad visual son expertas en leer mediante el sistema táctil braille, varias organizaciones sociales trabajan diligentemente para ayudarles a aprender las #665 combinaciones posibles y las #256 letras de este alfabeto, construido a través de puntos en relieve.
La impresora braille, es fundamental en esta misión inclusiva.
La impresora braille de #CODHEM, ubicada en sus instalaciones en #Toluca, es la única disponible para el público en general y se ofrece de forma gratuita. Ha sido fundamental para ayudar a múltiples departamentos gubernamentales a comunicarse eficazmente con personas que perciben el mundo a través del tacto y otros sentidos agudizados.
En el Estado de México, aproximadamente 355,000 personas tienen algún tipo de discapacidad visual. Sin embargo, no todas poseen las habilidades para leer Braille, ya que requiere formación dedicada y práctica para descifrar cada punto en relieve con precisión. Víctor Manuel Suárez Cruz, miembro del Departamento de Tecnología de la Información y Comunicación de #CODHEM, explicó que dominar el braille no es una tarea sencilla que se pueda lograr en unas pocas semanas.
Es un proceso que parte desde cero. Agregó que las instituciones ofrecen cursos desde básicos hasta completos, permitiendo a las personas especializarse en la lectura de braille, y con ello, puedan comunicarse mejor con el mundo que les rodea, al tiempo que aperturan el diálogo con las personas a su alrededor que cuenten con el mismo conocimiento.
En qué consiste la escritura braille?
La escritura en braille consiste en dos líneas de tres puntos cada una, se lee de arriba a abajo y de izquierda a derecha, y el lector utiliza su dedo para sentir cada grupo de seis puntos. Este sistema representa todo el alfabeto, símbolos, números e incluso notas musicales, lo que resulta en #665 combinaciones potenciales y #256 letras formadas por puntos en diferentes posiciones..
Aprender #braille requiere no solo conocimientos teóricos, sino también experiencia práctica, similar al proceso de aprender un nuevo idioma. Desafortunadamente, no todas las personas con discapacidad visual han adquirido esta habilidad. Es crucial entender que a las personas sin vista se les llama personas ciegas. El término “discapacidad visual” no es adecuado, ya que abarca a individuos con menos del 100% de capacidad visual que podrían depender de lentes correctivos. Esta condición no impide su capacidad para navegar, leer o participar en actividades con la ayuda de gafas.
Para medir el grado de discapacidad visual se utilizan generalmente los #optotipos o paneles de letras o símbolos. El campo visual es capacidad para percibir los objetos situados fuera de la visión central (que corresponde al punto de visión más nítido). La valoración del campo visual se realiza a través de la #campimetría.
La Clasificación Internacional de Enfermedades categoriza el deterioro de la visión en dos grupos: Deterioro de la visión cercana y Deterioro de la visión distante.
La experiencia individual de la discapacidad visual varía dependiendo de muchos factores diferentes. En ello influye, por ejemplo, la disponibilidad de intervenciones de prevención y tratamiento, el acceso a la rehabilitación de la visión (incluidos los productos de apoyo como gafas o bastones blancos), y también influye si la persona tiene problemas debido a la falta de accesibilidad física de los edificios, los medios de transporte o el acceso inadaptado de la información...