Está destinada a pacientes con melanoma y evita que la enfermedad se agudice; fue lograda por un equipo conducido por José Mordoh, como parte un programa entre la Fundación Sales e investigadores del Conicet.  Está destinada a pacientes con melanoma y evita que la enfermedad se agudice; fue lograda por un equipo conducido por José Mordoh, como parte un programa entre la Fundación Sales e investigadores del #Conicet.

El melanoma es un tipo de cáncer de piel que se origina cuando los melanocitos (las células que dan a la piel su color bronceado o marrón) comienzan a crecer fuera de control. El cáncer se origina cuando las células del cuerpo comienzan a crecer sin control.

Las nuevas terapias para el cáncer de piel estimulan nuestras defensas y evitan efectos tóxicos, pero los tratamientos son muy costosos. En Inglaterra, Estados Unidos y países europeos superan el valor de una casa: 100.000 euros o hasta 500.000 si se necesitan dos, tres o cuatro tratamientos.  Una solución viable es que las universidades y fundaciones intervengan en el desarrollo de medicamentos. 

Creada hace 47 años (1976), la Fundación #SALES es parte de esta solución, desarrolla programas de investigación del cáncer con investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (#CONICET) que logran avances internacionales.

Uno de ellos, José Mordoh, discípulo del premio Nobel argentino Luis F. Leloir y, en su juventud, del Nobel francés François Jacob (Instituto Pasteur de París), dirige desde hace más de 35 años un equipo científico que logró una vacuna terapéutica contra el melanoma, el más grave cáncer de piel. Esta vacuna de origen argentino fue aprobada por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (#Anmat), podrá utilizarse en pocos meses, producida por el laboratorio Pablo Cassará de la Argentina.

La vacunación aumenta la actividad del sistema inmunológico. Los ensayos clínicos con pacientes de nuestro país, donde anualmente se reportan entre 1.200 y 1.500 casos de melanoma, junto con alrededor de 600 muertes, demostraron que es altamente efectivo. La inmunoterapia oncológica moviliza las propias defensas de forma precisa y no invasiva, mientras que los tratamientos convencionales de quimioterapia y radioterapia estaban destinados a atacar las células cancerosas, destruyendo otras por falta de precisión. Fundación SALES y #CONICET poseen conjuntamente la propiedad intelectual de la vacuna. Los gastos antes mencionados reducen los costos de tratamiento porque ambas instituciones no obtienen ganancias, por lo que no tienen que pagar altas tarifas de importación y no tienen que incluir un porcentaje de la ganancia económica en sus costos.