Qué es la Fascitis Plantar ?
El dolor en el talón y la enfermedad de Sever
Las lesiones pueden producirse por una tensión excesiva en el tendón de Aquiles y la fascia plantar o por un impacto directo en el talón. Una tensión excesiva en este centro de crecimiento puede provocar la irritación del talón, también llamada enfermedad de Sever.
Síntomas
Los atletas con la enfermedad de Sever generalmente tienen entre 9 y 13 años y participan en deportes que implican correr o saltar como el fútbol, el fútbol americano, el baloncesto, el béisbol y la gimnasia. La queja típica es dolor en el talón que se desarrolla lentamente y se produce con la actividad. El dolor generalmente se describe como un moretón. Rara vez hay hinchazón o hematomas visibles. El dolor generalmente empeora al correr con calzado deportivo o con tacos que tengan una elevación del talón, una amortiguación y un soporte de arco limitados. El dolor generalmente desaparece con reposo y rara vez se produce en deportes de bajo impacto como el ciclismo, el patinaje o la natación.
Examen físico
Un examen físico del talón mostrará sensibilidad por encima de la parte posterior del talón, pero no en el tendón de Aquiles ni en la fascia plantar. Puede existir rigidez en el músculo de la pantorrilla, lo que contribuye a la tensión en el talón. Los tendones del talón se estiran más en los pacientes con pie plano. Hay una mayor fuerza de impacto en los talones de los atletas que tienen pies rígidos con arco alto.
Pruebas
El médico puede pedir una radiografía ya que ésta puede confirmar la madurez del centro de crecimiento y si hay otras zonas de dolor en el talón, como una fractura por fatiga o un quiste óseo. Sin embargo, no se necesita una radiografía para diagnosticar la enfermedad de Sever ya que no es posible realizar tal diagnóstico basados únicamente en la radiografía.
Otras afecciones que pueden provocar dolor en el talón
El dolor en el talón puede también ser provocado por una fractura por fatiga en el talón, bursitis, tendinitis, quistes óseos y trastornos articulares. Si el atleta no practica deportes de impacto de manera activa o no tiene entre 9 y 13 años, se deben considerar otras afecciones.
Tratamiento
Las siguientes son diferentes opciones de tratamiento:
- Descansar y modificar la actividad. Corra menos y limite la actividad de alto impacto para descansar el talón y disminuir el dolor. Juegue un deporte a la vez en el donde corra o salte. Reemplace las actividades de entrenamiento cruzado de bajo impacto para mantener la salud cardiovascular. Estas pueden ser ciclismo, natación, el uso de un escalador o una máquina elíptica, remo, o patinaje en línea.
- Reducir la inflamación. Colóquese hielo durante 20 minutos como mínimo después de la actividad o cuando el dolor aumente. También se pueden usar antiinflamatorios no esteroides (nonsteroidal anti-inflammatory drugs, NSAID).
- Estirar la pantorrilla. Aumente la flexibilidad de la pantorrilla con estiramientos durante 30 a 45 segundos varias veces al día.
- Proteger el talón. Es posible que sea necesario modificar el calzado para proporcionar la elevación del talón o el soporte de arco correctos. Si es posible, seleccione un calzado con buena elevación del talón y un soporte de arco adecuado. Pruebe soportes de elevación del talón o plantillas en el calzado deportivo, especialmente en aquellos que tengan tacos. Pruebe un soporte de arco en los zapatos deportivos con tacos si los pies planos agravan el problema.
La fascitis plantar generalmente causa un dolor punzante en la planta del pie, cerca del talón. Por lo general, el dolor es más intenso al dar los primeros pasos después de despertarse, aunque también puede desencadenarse por estar de pie durante mucho tiempo o al levantarse después de estar sentado.
Factores de riesgo
Aunque la fascitis plantar puede presentarse sin una causa obvia, algunos factores pueden aumentar el riesgo de desarrollar esta afección. Entre estos, se incluyen los siguientes:
- Edad. La fascitis plantar es más común en las personas entre 40 y 60 años.
- Ciertos tipos de ejercicio. Las actividades que ejercen mucha presión sobre el talón y los tejidos adheridos, como las carreras de larga distancia, el ballet y la danza aeróbica, pueden contribuir a la aparición de la fascitis plantar.
- Mecánica del pie. Los pies planos, un arco alto o incluso un patrón atípico de caminar pueden afectar la forma en que se distribuye el peso cuando estás de pie y pueden poner más tensión en la fascia plantar.
- Obesidad. El exceso de peso ejerce una presión adicional sobre la fascia plantar.
- Profesiones en las que debes mantenerte de pie. Los trabajadores de fábricas, los maestros y otras personas que pasan la mayor parte de sus horas de trabajo caminando o de pie sobre superficies duras pueden tener un mayor riesgo de sufrir de fascitis plantar.
Complicaciones
Ignorar la fascitis plantar puede provocar dolor crónico en el talón que dificulta las actividades cotidianas. Es probable que cambies la forma de caminar para evitar el dolor de la fascitis plantar, lo que puede generar problemas en el pie, la rodilla, la cadera o la espalda.