
Síndrome de Kessler, una amenaza espacial
Se acerca el Síndrome de Kessler, la amenaza invisible que podría cerrar para siempre el acceso al espacio. El Síndrome de Kessler es un escenario hipotético donde la acumulación de basura espacial en órbita baja terrestre (LEO) podría generar una reacción en cadena de colisiones, creando aún más desechos y poniendo en peligro a los satélites y la estación espacial internacional. Este fenómeno, propuesto por el consultor de la NASA Donald J. Kessler, describe un estado en el que la densidad de objetos en LEO se vuelve tan alta que las colisiones entre ellos se vuelven comunes, aumentando exponencialmente la cantidad de basura espacial.
Los expertos están bien atentos a fenómeno conocido como Síndrome de Kessler, una reacción en cadena silenciosa se está gestando sobre nuestras cabezas Según la teoría que expusieron los científicos de la NASA Donald J. Kessler y Burton Cour-Palai en el año 1978, el fenómeno conocido como Síndrome de Kessler describe un escenario catastrófico: una reacción en cadena de colisiones entre basura espacial en la órbita baja terrestre, que genera más fragmentos, más impactos y, finalmente, una barrera impenetrable de desechos.
Durante años, los expertos en tráfico espacial han dado la voz de alarma sobre la creciente congestión. Las colisiones, explosiones y pruebas de armas anteriores han dado como resultado decenas de miles de fragmentos de escombros que los expertos están rastreando y posiblemente millones más que no se pueden ver con la tecnología actual.Y aunque los riesgos para los astronautas pueden ser una preocupación principal, la congestión en órbita también es peligrosa para los satélites y las tecnologías espaciales que impulsan nuestra vida cotidiana, incluidas las herramientas GPS, así como algunos servicios de banda ancha, Internet de alta velocidad y televisión. Pero estas frases describen en líneas generales un escenario en el que los desechos en el espacio desencadenan una reacción en cadena: una explosión envía una nube de fragmentos que a su vez chocan contra otros objetos espaciales, creando más detritos. El efecto en cascada puede continuar hasta que la órbita de la Tierra esté tan obstruida con basura que los satélites se vuelvan inoperativos y la exploración espacial deba detenerse por completo.