Para calmar el dolor de cadera, puedes probar con descanso y medicamentos de venta libre como ibuprofeno o paracetamol. También son útiles las terapias de frío y calor (primero frío, luego calor), mantener un peso saludable y realizar ejercicios de bajo impacto y estiramientos suaves.
Remedios en casa
Descanso: Evita actividades que empeoren el dolor y no permanezcas sentado o de pie por largos períodos.
Frío y calor: Aplica hielo durante los primeros 1 o 2 días, y luego alterna con calor o solo aplica calor. Un baño tibio puede ser útil. Analgésicos: Toma medicamentos de venta libre como ibuprofeno o paracetamol. Posición para dormir: Intenta dormir boca arriba, colocando una almohada entre las piernas.
Evita dormir sobre el lado dolorido.
Peso corporal: Si tienes sobrepeso, perder peso puede reducir la presión sobre la cadera. Movimiento y ejercicios
Movimientos suaves:
Mantenerse en movimiento suave es beneficioso, ya que la inactividad puede causar rigidez.
Evita movimientos bruscos. Estiramientos: Realiza ejercicios de estiramiento suaves para los flexores de la cadera, como deslizar el pie hacia atrás mientras te inclinas.
Actividades de bajo impacto:
Considera nadar o andar en bicicleta.
Calzado: Usa zapatos planos, cómodos y acolchados. Cuándo consultar al médico
Si el dolor no mejora después de varias semanas. Será interesante evaluar otras opciones de tratamiento.
⚠️ Advertencia Importante
Los contenidos publicados en esta sección han sido elaborados con base en afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios, recogidos por un grupo de periodistas especializados. Recomendamos al lector que, teniendo en cuenta su historial clínico, consulte con un profesional del ámbito sanitario.















































































